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Paisaje, flora y fauna
El macizo de Gorbeia es una extensa zona montañosa situada en la divisoria de aguas cántabro-mediterránea y compartida entre los Territorios Históricos de Bizkaia y Álava. La altitud de este espacio le confiere un clima típico de montaña: el macizo actúa como una barrera que detiene los vientos húmedos que provienen del golfo de Bizkaia, lo que genera importantes diferencias entre la vertiente norte, más húmeda, y la vertiente sur, más seca y soleada. Gorbeia posee, en consecuencia, una excepcional riqueza de ecosistemas de montaña con un buen estado de conservación. A su abrupta topografía habría que añadir por otro lado el uso pecuario que el ser humano ha hecho de este entorno a lo largo de miles de años. Todo ello ha configurado un espacio de gran valor natural y diversidad de ambientes, que se traduce en la coexistencia de bosques naturales, brezales y pastizales de montaña, roquedos, humedales (charcas de Altube, humedal de Saldropo, esfagnales, etc.) y arroyos. Más del 70% de la superficie de la ZEC se encuentra ocupada por masas forestales; de éstas, cerca del 67% corresponde a frondosas y el 33% restante a plantaciones de coníferas. Los hayedos, acidófilos y basófilos, y, en menor medida, los marojales son los principales bosques de Gorbeia.
La importancia de los valores naturales de este espacio determinó que en 1994 Gorbeia fuese declarado Parque Natural. Además, desde 2016 Gorbeia está designado Zona de Especial Protección (ZEC), un Espacio Natural Protegido perteneciente a la Red Natura 2000, una extensa red de espacios protegidos a nivel europeo cuyo objetivo es garantizar la supervivencia a largo plazo la conservación de las especies y los hábitats más valiosos y amenazados. En su declaración como ZEC se realizaron un conjunto de ajustes cartográficos y una pequeña ampliación de su delimitación que han hecho que este cuente con una superficie de 15 ha más respecto a su delimitación inicial.
BIOTOPO PROTEGIDO DE ITZINA
El agua, a lo largo de siglos, ha ido erosionando las rocas calcáreas de Itzina dando lugar a un intrincado paisaje de piedra. La gran grieta central, el Túnel de Arko Axpe, el Ojo de Atxular, la Dolina de Axlaor y la Cueva de Supelegor son sus formaciones kársticas más espectaculares. Hoy, las hayas intentan cubrir la desnuda roca y en sus grietas y cuevas viven diferentes especies de murciélagos.
EL RÍO BAYAS
En el río Bayas aún se conservan buenos ejemplos de los bosques ribereños (alisedas y saucedas), que dan cobijo a algunos de los animales más emblemáticos del Parque. La trucha común todavía nada entre sus aguas y el martín pescador se zambulle como un arpón en busca de su alimento. La nutria y el visón europeo, dos de las especies más amenazadas del País Vasco, también encuentran alimento y refugio en este río.
CASCADA DE GUJULI
Al suroeste del Parque Natural de Gorbeia, el arroyo Oyardo, afluente del río Altube, ha formado en el municipio de Urkabustaiz, muy cerca del pequeño núcleo rural de Goiuri/Gujuli, una espectacular y bella cascada. Sus aguas caen, desde una altura de más de 100 metros, sobre el hayedo de Altube, uno de los bosques más extensos de la Comunidad Autónoma del País Vasco.
CIERVO
El ciervo, fue reintroducido en el Parque a mediados del siglo pasado. Durante la berrea, en los meses de septiembre y octubre, el poderoso grito de los machos retumba en las masas forestales de la vertiente alavesa del macizo.
TURBERA DE SALDROPO
Esta turbera se originó hace unos 6.000 a 5.500 años, a partir de una pequeña laguna. A mediados del siglo XX empieza a extraerse su turba, hasta que en los años ochenta, la turbera desaparece. Actualmente, su recuperación espontánea demuestra la tendencia natural a convertirse en un bosque encharcado, con zonas abiertas y charcas donde conviven un elevado número de especies animales y vegetales.
BOSQUE Y HUMEDALES DE ALTUBE
En Altube crece uno de los bosques más extensos del País Vasco. En su corazón se encuentra un interesante hayedorobledal –Peña Iñurbe–, donde viven infinidad de animales: colirrojo real, azor, corzo, marta... También hay unas zonas húmedas, que son verdaderos paraísos para anfibios, como los tritones alpino, palmeado y jaspeado, la ranita de San Antonio y las ranas común, ágil, patilarga y bermeja.